Antes de que despuntara el alba en Venezuela, el gobernante Nicolás Maduro, a quien la Corte Penal Internacional podría abrir un juicio por delitos de lesa humanidad luego de considerar que existen fundamentos para ello, tomaba la palabra en la sesión de alto nivel del 46 ° período ordinario de sesiones del Consejo de Derechos Humanos, la máxima instancia de defensa de los Derechos Humanos en la Organización de las Naciones Unidas.

EsPaja.com verificó en vivo el discurso de 10 minutos con 20 segundos del mandatario venezolano que se realizó a través de un video grabado en el que apareció con un liquiliqui negro (traje tradicional venezolano). Antes de Maduro intervinieron otros presidentes, entre ellos Iván Duque, quien dedicó buena parte de su discurso al tema de la migración venezolana. 

Maduro asegura que Venezuela tiene de una salud pública gratuita y de calidad

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Debido a la incapacidad de respuesta del sistema sanitario en Venezuela, los ciudadanos han tenido que acudir, cada vez más, al sistema privado. Las consultas médicas pueden ir desde los $20 hasta $50 o más. La realización de exámenes de laboratorio como el perfil 20 ronda los $15. Una endoscopia cuesta entre $80 y $120, mientras que una colonoscopia puede sobrepasar los $130. Lo que ha dejado el derecho de la gratuidad de la salud pública en una mera ilusión. 

Con un salario mínimo de 1,2 millones de bolívares, menos de un dólar según la tasa del Banco Central de Venezuela (BCV), es imposible pagar una consulta, exámenes o medicamentos. Acudir al sistema de salud público tampoco es una opción, ya que los pacientes deben esperar meses para conseguir una cita con algún especialista. 

La pandemia agravó la situación. En todo el 2020 fue precaria la dotación de guantes, tapabocas, lentes, batas descartables y todo el material de bioseguridad necesario. Según Monitor Salud, desde el 24 de marzo hasta el 2 de abril de 2020, el 43% de las salas de emergencia de al menos 58 centros de salud a nivel nacional no contaba con guantes de protección y solo el 55% tenía mascarillas.

Maduro: “Nos comprometemos a trabajar en conjunto con todos los actores de este Consejo”

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Hasta ahora las acciones del gobernante no han dado cuenta de tal colaboración. La Misión Internacional Independiente de Investigación sobre la República Bolivariana de Venezuela se estableció el 27 de septiembre de 2019. El Consejo de Derechos Humanos de las Naciones Unidas le encomendó durante un año investigar los supuestos crímenes de lesa humanidad cometidos en Venezuela desde 2014.

La Misión no pudo visitar Venezuela debido a que el Gobierno no respondió a las reiteradas solicitudes. Además, se enfrentó a otras restricciones de viaje debido a la pandemia de COVID-19. 274 entrevistas a víctimas, testigos, familiares, ex funcionarios del Estado, abogados, entre otros, fueron hechas a distancia. En septiembre de 2020 fue publicado el informe de 443 páginas sobre las violaciones a los DDHH en el país.

La respuesta de las autoridades del régimen de Maduro es que el documento resultante constituyó "propaganda de guerra", como dijo el canciller Jorge Arreaza. El mandatario afirmó entonces, falsamente, que esa Misión de Determinación de Hechos dependía del Grupo de Lima.

Maduro: "Venezuela ha logrado controlar la pandemia gracias a una política social preexistente de salud pública, gratuita y de calidad"

EsDiscutible

Oficialmente, Venezuela tiene menos contagios que cualquier país soberano de Suramérica hasta el 22 de febrero de 2021 (excepto Uruguay, Surinam y Guyana). Sin embargo, las cifras han sido cuestionadas desde varios frentes: modelos matemáticos, expertos científicos, la oposición venezolana y hasta por las incongruencias oficiales.

La escasez de pruebas para detectar la COVID-19 —tanto de tipo molecular como las sanguíneas— es considerada una de las causas de este presunto subregistro, según expertos como José Félix Oletta, exministro de salud. También el infectólogo Julio Castro ha argumentado que la escasez de gasolina —con la consecuente reducción de la movilidad— pudiera haber incidido en cifras relativamente bajas de contagios, más que política social preexistente de salud.

Maduro: "Por medio de las mal llamadas sanciones Venezuela ha sido privada de al menos $30.000 millones en efectivo"

EsUnMisterio

Si bien hay estimaciones independientes, es difícil determinar el monto exacto que Venezuela ha dejado de percibir por las sanciones impuestas desde agosto de 2017 por el gobierno de Estados Unidos.

La economía venezolana arrastra desde 2013 una caída del Producto Interno Bruto que ha representado que, al cierre de 2020, sea un cuarto de lo que era siete años atrás. La rampante corrupción, el derrumbe de los precios del crudo a mediados de 2014, la debacle de la producción de Petróleos de Venezuela y la destrucción del aparato productivo, supuso una significativa merma en los ingresos del país.

Las sanciones llegaron en agosto de 2017 y se incrementaron en enero de 2019. Expertos coinciden en que las medidas administrativas impuestas por EEUU a Venezuela, en su intento por sacar a Maduro del poder, han tenido un impacto en la economía. 

Un análisis de los economistas Mark Weisbrot y Jeffrey Sachs del Center for Economic and Policy Research, basado en Washington, señala que las sanciones de 2017 perjudicaron la producción de petróleo en Venezuela, "lo que implicaría una pérdida de $6 mil millones en ingresos petroleros para el año siguiente".

En marzo de 2020, el economista venezolano Francisco Rodríguez, director de Oil for Venezuela (Petróleo para Venezuela), señalaba a Petroguía que si Pdvsa lograba que se levantara las sanciones, eso representaría recursos adicionales al eliminar las ventas a descuento. "Partiendo de un nivel de exportación de aproximadamente 600.000 barriles diarios, la reducción de ese descuento podría proporcionar a Venezuela aproximadamente 4.390 millones de dólares al año".

Sin embargo, es difícil determinar de manera tajante cuánto dinero en efectivo ha dejado de percibir el Estado venezolano, porque si bien se han perdido clientes convencionales, la administración Maduro ha sabido burlar algunas sanciones.

Resulta un misterio saber con exactitud cuánto dinero ha dejado de ingresar. Para ello habría que conocer en función de qué variables o proyecciones se basa Maduro para asegurar que se trata de más de $30.000 millones. Y esos datos no los reveló.

Maduro en la ONU: "Los secuestradores de activos y recursos del Estado venezolano (...) han incrementado las agresiones económicas generando una crisis humanitaria de manera alevosa y premeditada"

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Es falso que los activos y recursos confiscados hayan incrementado las agresiones (sanciones) económicas y generado una crisis humanitaria de manera alevosa y premeditada, como lo señaló Nicolás Maduro ante la 46° sesión del Consejo de los Derechos Humanos de la ONU.

La crisis humanitaria, de acuerdo con distintas instancias –incluyendo el PNUD, Acnur y OCHA de la ONU– han reconocido que tal situación se viene presentando en Venezuela desde 2015, cuando constataron tras un recorrido en agosto de ese año que unas 1.500 personas cruzaban la frontera a diario hacia Colombia.

Solo en 2016 murieron en el país 11.466 niños menores de un año, un aumento de 30,12% con respecto a 2015, y en tanto que las muertes de madres se incrementó 66%, de acuerdo con los boletines epidemiológicos del Ministerio de Salud, publicados en mayo de 2017.

Las sanciones comenzaron a correr en agosto de 2017, por lo que había evidencia de una crisis humanitaria.

A finales de 2018 la Fundación Bengoa reconocía: “Venezuela pasa por una Emergencia Humanitaria Compleja desde 2015 que compromete severamente el derecho humano a la alimentación de sus 31,8 millones de habitantes y especialmente de las poblaciones y comunidades en extrema pobreza por los efectos del hambre y la desnutrición”.

“Los secuestradores de activos y recursos”, como refirió Maduro ante la ONU, no pudieron provocar “una crisis humanitaria de manera alevosa y premeditada" porque ya existía. 

*Con aportes de Ligia Perdomo, Alexis Correia y Valentina Gil.