A nuestro WhatsApp llegó un video de una persona consultando en la página web del Consejo Nacional Electoral cédulas de identidad de personas que ya están fallecidas, pero que de todos modos aparecen en el Registro Electoral definitivo para las elecciones del 28 de julio.
El usuario anónimo busca en la web del Poder Electoral las cédulas 40 y 80, correspondientes a los ciudadanos Guillermo Jell Villegas Pulido y Rafael Cirilo Goyo-Rodríguez, respectivamente. EsPaja constató que, efectivamente, ambos aparecen en el padrón.
Ante este escenario, lo primero que viene a la mente es si existe la posibilidad de que se usurpe la identidad de la persona fallecida.
Humberto Rojas, coordinador de la Red de Observación Electoral de la Asamblea de Educación, explicó para EsPaja que esta incidencia no es imposible, pero sí es cuesta arriba. Para que un elector se haga pasar por otro en una mesa de votación, no solo debe tener el dato de esa persona, sino también la cedula laminada, al igual que la persona que cometa la infracción debe pasar por la autenticación de las huellas dactilares.
En caso de que las huellas dactilares no coincidan, si el votante aparece en el libro, el presidente de mesa entonces puede tomar la decisión de habilitar la máquina para votar. No obstante, esto sólo puede hacerlo si previamente ya han votado 8 personas cuya huella si coincide.
Además, hay un límite de veces en que esto se puede hacer sin que se tranque la máquina y, en caso de que suceda, entonces se debe solicitar un código de activación al CNE.
Por otro lado, otro filtro de seguridad son las auditorías posteriores al día de la votación. "Esas auditorías incluye la de no duplicidad de huellas. En estas auditorias pueden conocer si algunos electores votaron varias veces o incluso si usurparon identidad de otros ciudadanos. Hasta ahora, si bien se han conseguido algunos casos, no han sido representativos", detalló Griselda Colina, fundadora del Observatorio Global de Comunicación y Democracia y exrectora suplente del CNE.
También Juan Carlos Caldera, representante de la Plataforma Unitaria (PUD) ante el Poder Electoral, aseguró que este tipo de irregularidad no ha tenido mayor incidencia en los resultados electorales.
¿Por qué hay personas fallecidas en el padrón electoral?
Si tomamos en cuenta que la cédula 1 se emitió en 1942, la cual perteneció al expresidente Isaías Medina Angarita (1897-1953), podemos asumir que estas personas ya fallecieron. Entonces, ¿por qué todavía salen como votantes activos?
El proceso de depuración del RE es una de las responsabilidades de la Comisión de Registro Civil y Electoral. Así lo establece el Artículo 59, numeral 18, de la Ley Orgánica del Poder Electoral (LOPE): "Depurar en forma continua y efectiva el Registro Electoral y publicarlo en los términos establecidos en la ley, para su posterior remisión a la Junta Nacional Electoral".
Para dejar constancia de un fallecimiento, los familiares o declarantes deben presentar la cédula de identidad del fallecido y el certificado de defunción como únicos requisitos para obtener el acta de defunción.
El Artículo 64 de la Ley de Registro Civil, aprobada en 2009, indica que "todas las oficinas y unidades de Registro Civil operarán bajo un solo sistema automatizado; la selección del mismo, así como su dotación corresponderán al Consejo Nacional Electoral".
Griselda Colina también explicó para EsPaja que, si bien el Registro Civil comparte la data de fallecidos al CNE, la administración electoral debe iniciar un procedimiento para depurar el padrón y para mostrar esto en cada corte del registro. Pero la limpieza del RE por fallecimientos no se hace de forma regular.
De acuerdo con los registros de Súmate, el promedio de mortalidad en Venezuela, de 2004 a 2024, es de 2.500.000 de personas. En ese período de 20 años, según constató la ONG, el CNE hizo efectivas 1.800.000 exclusiones. Entonces, hay un rezago de 700.000 de electores fallecidos que aún figuran en el padrón electoral. En parte por la ineficiencia de las instituciones, pero también están las muertes que ocurrieron antes de que el sistema fuera digital y constan en los libros de registro.
Tampoco la publicación de los cortes del padrón electoral es constante. La ONG Súmate reportó en su Monitor Electoral nº 77 que el comportomamiento de los últimos 15 cortes del RE (desde el 15 de julio de 2021 hasta el 16 de abril de 2024) no ha sido regular en cuanto a la periodicidad de su publicación.
Como los cortes no ofrecen detalles sobre las personas que salieron del padrón, si alguien quiere verificar si su familiar fue desincorporado, tiene que hacerlo a través de la página del Poder Electoral. En caso de que no, los interesados deben bajar en la página web la planilla de reclamo, consignar los requisitos, y enviarlos al correo [email protected] o llevarlos personalmente a alguna de las oficinas regionales electorales.
De igual modo, el CNE tiene una política de suspender de su condición de votantes a aquellas personas que superen los 110 años. En su misma página web tienen una sección con un listado de ciudadanos con edades comprendidas entre los 111 y 129 años, la cual indica que, en caso que la persona no se encuentre aún fallecida, debe solicitarse la visita de un agente de inscripción y actualización del Registro Electoral para convalidar la información y de esta manera actualizar sus datos.
Pero si la persona está fallecida, se puede consignar el acta de defunción en cualquiera de los centros de inscripción y actualización de datos del Consejo Nacional Electoral o enviar un correo a [email protected].
El martes 4 de junio, el CNE divulgó la Gaceta Electotal nº 1057, la cual muestra el total de electores que votarán el próximo 28 de julio: 21.620.705 electores. El documento también refleja que, entre la publicación del padrón electoral preliminar y el definitivo, se desincorporaron 22.144 electores (entre fallecidos e inhabilitados).