Durante su discurso ante la 76 Asamblea General de las Naciones Unidas, el mandatario venezolano, Nicolás Maduro, afirmó que "se nos ha secuestrado el oro de las reservas internacionales legales del Banco Central de Venezuela en Londres". Esta afirmación es engañosa.
Venezuela y Reino Unido mantienen una disputa legal desde mediados de 2019 por las 31 toneladas de oro de las reservas internacionales de Venezuela –valoradas en 1.000 millones de dólares– que están en custodia del Banco de Inglaterra.
En noviembre de 2018, el gobierno venezolano inició las gestiones para repatriar parte del oro que se encontraba en las bóvedas del Banco de Inglaterra por temor a que las sanciones impuestas por la administración de Donald Trump al comercio de oro y posibles embargos privaran a Venezuela de esos recursos en momentos de ingresos disminuidos en medio de una fuerte crisis económica e hiperinflación. La negativa de la institución británica llegó ese mismo mes.
Tras la autoproclamación del presidente de la Asamblea Nacional, Juan Guaidó (enero de 2019), como presidente encargado de la presidencia, luego que el cuerpo legislativo desconociera la toma de posesión de Nicolás Maduro, Inglaterra reconoció a Guaidó como legítima autoridad.
Guaidó solicitó ese mismo mes a Theresa May, para la fecha primera ministra de Inglaterra, y al entonces gobernador del Banco de Inglaterra, Mark Carney, no entregar el oro al gobierno de Maduro porque lo usaría para financiar la corrupción.
Desde 2019 se adelanta una disputa legal, aún sin resolución. Pero en 2020, con la llegada del coronavirus SARS-CoV-2 al país, Maduro reclamó de nuevo el oro en abril y propuso al Banco de Inglaterra que vendiera parte del oro y canalizar esos recursos través del Programa de Naciones Unidas para el Desarrollo (PNUD) para atender la emergencia sanitaria.
En mayo de 2020, el Banco Central de Venezuela acudió a un tribunal londinense. Pero desde julio de 2021 el Tribunal Supremo británico evalúa el caso.
El gobierno de Venezuela ha denunciado en varias ocasiones que se trata de un "robo" de activos en el extranjero, de apropiación ilegítima, o de secuestro, como Maduro lo dijo ante la ONU durante su intervención en la 76 Asamblea Anual. Sin embargo existe un litigio y por tanto se espera que la Corte Suprema inglesa determine quién será la autoridad venezolana (Guaidó o Maduro) que podrá recibir el oro de las reservas internacionales que custodia el Banco de Inglaterra.