“(Rafael) Caldera fue padrino de (Hugo Rafael) Chávez en la Academia Militar”, asevera la periodista Ludmila Vinogradoff en el obituario del dos veces presidente socialcristiano que publicó el diario español ABC en 2009.

El padre José Palmar se cuenta entre los que han repetido la afirmación publicada en ABC, que tampoco es infrecuente encontrar de tanto en tanto en redes sociales, incluso bajo un nexo mucho más íntimo: un padrinazgo de bautizo habría unido al primer mandatario en ejercicio en 1994 y al militar golpista preso al que otorgó un sobreseimiento ese año, y que le sucedería en 1999.         

“No. Antes de los acontecimientos del 4 de febrero de 1992, Caldera —como tantos venezolanos— no conocía a Chávez”, se indica expresamente sobre este asunto en la sección de mitos y realidades del portal oficial dedicado a preservar la memoria del fundador del partido Copei.

Se agrega en esa página web: “(Caldera) lo encontró en persona, por primera vez, el 9 de diciembre de 1998, cuando fue a Miraflores como Presidente electo. ‘Fue la primera vez que hablamos —dijo Caldera a César Miguel Rondón— y me pidió excusas, me pidió perdón por todos los ataques injustos que había tenido para conmigo en la campaña electoral’. 

El domingo 8 de noviembre de 2009, en la conmemoración de los 85 años del fallecimiento de Pedro Pérez Delgado, "Maisanta", de quien descendía por línea materna, Hugo Chávez identificó como su padrino de bautizo a Eligio Piña tanto en su programa de televisión Aló, Presidente como en su columna de opinión Las líneas de Chávez: "Me aliviaba mucho oírle a mi padrino Eligio Piña sus cuentos de cosas viejas”.

“Jamás he sabido nada de esto. Ni tengo idea de dónde salió”, contestó ante la consulta el historiador Rafael Arráiz Lucca, que coordinó en 2016 la edición del libro biográfico Rafael Caldera: estadista y pacificador. Centenario de su nacimiento 1916-2016.

Cristina Marcano y Alberto Barrera Tyszka son autores de la que es probablemente la biografía más documentada del fallecido militar: Chávez sin uniforme (2004). “Según yo recuerdo, jamás escuchamos ese rumor. Y me parece raro: no hay mucha coincidencia en sus historias como para que fuera padrino... ¿De qué, además? De entrada te digo que no. Y, la verdad, me parece demasiado improbable.  Tan hablador y egocéntrico que era Chávez. ¡Lo hubiera dicho él mismo!”, respondió el escritor por correo electrónico. 

Marcano también expresó asombro a través de una llamada telefónica: “No, nunca lo escuché. Para nada. Me parece un poco descabellado. De hecho, cuando entrevistamos a Caldera (para el libro) no surgió nada de eso. En caso de que no lo hubiera querido decir por algún motivo, tampoco oí nunca que les uniera un vínculo de ese tipo. Tampoco de que se conocieran antes del (intento de) golpe de 1992”.

“Lo puedo asegurar plenamente: es una absoluta mentira”, ratificó el ex diputado nacional Rafael Simón Jiménez, compañero de liceo de Chávez en la capital del estado Barinas. “¿De dónde surgió este rumor? No lo tengo claro, quizás del hecho de que en su familia fueron copeyanos tardíos. Pero el padre de Hugo Rafael (Hugo de los Reyes Chávez) en ningún caso fue copeyano antes de 1971, cuando Caldera estaba gobernando. En 1954, cuando nace su segundo hijo, estoy seguro de que Hugo de los Reyes ni siquiera sabía de la existencia de Rafael Caldera”.

“Todas son leyendas que surgieron después del sobreseimiento de 1994. Por ejemplo, se ha dicho que Rafael Clarencio González, un líder copeyano también conocido como el ‘hombre del maletín’, llevó a Chávez a la Academia Militar. Falso. Chávez entró él mismo a la academia, porque tenía ganas de ingresar, lo que se facilitó por su condición de deportista”, aclaró Jiménez.

Hugo Rafael Chávez egresó de la Academia Militar de Venezuela en julio de 1975, como miembro de la promoción Simón Bolívar II. En ese momento Carlos Andrés Pérez ya tenía más de un año en Miraflores como presidente en ejercicio.

Crédito de foto: Psuv.org.ve