Dos vecinos que no se tratan. Por el lado venezolano, la frontera con Colombia está cerrada para tránsito vehicular desde agosto de 2015. Debido a la pandemia, las autoridades neogranadinas también prohibieron oficialmente el paso de venezolanos desde 2020. A finales de mayo de 2021, el gobierno de Iván Duque anunció unilateralmente su intención de reabrir los pasos fronterizos el martes 1º de junio.
La respuesta de Nicolás Maduro: reavivar el fantasma del bioterrorismo de Estado, ya esgrimido en 2020 contra Bogotá.
"Solo quieren usar la apertura de la frontera para perturbar y mandarnos esas variantes mas peligrosas que la brasilera para contaminar a Venezuela. Así lo denuncio" (domingo 23 de mayo de 2021). Maduro reiteró estas acusaciones en su cuenta oficial de Twitter y agregó una información científica llamativa: "Las variantes de la India, Sudáfrica y de California están corriendo con fuerza en Colombia".
La información que dio el mandatario de Venezuela es falsa. O en todo caso, solo la maneja su gobierno de manera confindencial, sin respaldo en ningún estudio científico difundido de manera pública, y por tanto, es indemostrable.
La Organización Panamericana de Salud publicó su más reciente boletín de actualización epidemiológica sobre COVID-19 el 18 de mayo de 2021 (descargable en PDF). Allí se difundieron las variantes "de interés científico" detectadas hasta esa fecha en países afiliados a la OPS, incluida Colombia.
Nótese bien: "detectado" no es sinónimo de "existente". Cabe la posibilidad de que las denominadas variantes circulen en un país, pero no hayan sido descubiertas (no es posible diferenciarlas en pruebas de descarte simples).
Pero al menos hasta el citado 18 de mayo, la OPS solo respalda el hallazgo de dos variantes en Colombia: B.1.1.7 (detectada por primera vez en Reino Unido) y P.1 (en Brasil).
Vistas tomadas del documento:
De los países o territorios miembros de la OPS, solo seis habían detectado cuatro variantes "de interés científico" del coronavirus SARS-CoV-2 hasta el 18 de mayo de 2021: Argentina, Aruba, Canadá, México, Panamá y EEUU.
Brasil, Chile, Costa Rica, Guayana Francesa, Puerto Rico y Surinam habían detectado tres variantes.
Entre el 18 de mayo (boletín epidemiológico de OPS) y el 23 de mayo (palabras de Maduro) cabe un período "ciego" en el que pudieran haberse registrado descubrimientos novedosos sobre variantes en Colombia. Pero nuevamente no hay respaldo de ello en la información pública de los organismos de salud del Estado colombiano.
Solo se sabe que, para prevenir la llegada de las llamadas "variantes indias", Bogotá había prohibido el ingreso de viajeros no residentes provenientes de la India hacia finales de mayo de 2021.
¿Por qué las variantes despiertan preocupación?
Las variantes del coronavirus son el resultado de un proceso evolutivo natural. Hay evidencia de que algunas de estas variantes son más contagiosas. Pero también debe decirse que el veredicto de la comunidad científica dista de ser unánime.
En un mismo medio de comunicación internacional (por ejemplo, la televisora española Antena 3) pueden encontrarse opiniones discrepantes de expertos igualmente respetados:
- "No ha llegado esa variante que nos tenga que asustar tanto como para pensar en cambiar todas las vacunas": el inmunólogo Alfredo Correll
- "La variante india del COVID-19 podría cambiar completamente el tablero de juego": César Carballo, doctor de emergencias.
En Venezuela, oficialmente solo se conoce una variante de interés especial, la P.1 ("brasileña"): representa hasta 90% de los casos más recientes detectados en mayo de 2021, según Héctor Rangel, el doctor en virología e investigador del Instituto Venezolano de Investigaciones Científicas (IVIC).
Sin embargo, el país caribeño se haya sumido en una emergencia humanitaria compleja, que incluye una emergencia sanitaria, y probablemente la capacidad de detección de sus laboratorios es muy limitada. La Asamblea Nacional de mayoría opositora elegida en 2015 y expertos médicos han cuestionado los datos oficiales del gobierno de Maduro.