El Vaticano y el papa fueron tendencia en Venezuela el 10 de enero de 2021 e incluso hasta la mañana del 11 de enero. Un apagón en el Vaticano, la detención del papa por una acusación formal de 80 cargos –entre estos tráfico de personas y pornografía infantil–, la aparición del FBI (Buró Federal de Investigaciones) para interrogar a la máxima figura del catolicismo en el mundo, la no aparición de Francisco en la misa dominical del Ángelus y la interferencia del Vaticano en las elecciones de Estados Unidos, fueron parte de la falsa trama compartida en redes sociales.

El origen del fake estuvo en una imagen a oscuras del Vaticano, la noche del 9 de enero. "Todo empezó con alguien conectándose a la webcam que emite en directo imágenes de la Plaza San Pedro desde Vatican News", reseñó el diario español El Confidencial.

A partir de allí surgieron varias teorías sobre el supuesto blackout, que escondería el presunto arresto del papa. Entre estas, una información publicada por un medio canadiense que colocó al Vaticano, sede de la iglesia católica romana, y al sumo pontífice en los tres primeros lugares de los tópicos de Twitter.

Conservative beaver, un medio conservador canadiense, tituló Apagón en el Vaticano: Papa arrestado por 80 cargos de tráfico de niños y fraude. Y es este texto del que se vale Prevencia.net y otros usuarios para crear lo que se puede llamar –como lo refleja El confidencial– una conspiración en el Vaticano.

El medio señala: "Oficiales militares, policías italianos y su Unidad de Delitos Sexuales fueron a la casa del Papa en el Vaticano, lo detuvieron a él y a varios oficiales de alto rango, y los pusieron a todos bajo arresto sin incidentes. Las personas cercanas al lugar han informado haber escuchado disparos, pero la Policía no confirmó si fueron ellos los que dispararon las armas".

Pero nada de eso ocurrió tras el supuesto apagón. "Las luces de la Plaza de San Pedro, que iniciaron la lluvia de fake news, se apagan cada noche y se encienden a las seis de la mañana del día siguiente", informa El Confidencial.

El portal canadiense incluso asegura que la Fiscalía Nacional italiana confirmó que ordenó las detenciones y presentó los cargos, así como que el papa Francisco se encuentra en una prisión desconocida, siendo interrogado por agentes federales que trabajan para el estado de Italia e Interpol.

Quizá los hechos del 6 de enero en el Congreso de los Estados Unidos, en los que un grupo de seguidores del presidente saliente Donald Trump, irrumpieron con atavíos estrafalarios para sabotear el conteo de votos que a la larga favorecería a Joe Bieden, dejaron a muchos ávidos de otra historia de acción.

Este es uno de los mensajes encontrados en Twitter sobre la teoría del supuesto apagón, colgado por Miguel Díaz, quien dice en su perfil que informa "lo que ocultan los grandes medios":

Pero el papa sí estuvo presente en la oración del Ángelus, aunque solo, como acostumbra desde que la COVID-19 fue declarada pandemia y se restringió el acceso a los feligreses a la Plaza de San Pedro, como medida para prevenir el contagio.

De acuerdo con el canal del Vaticano, Francisco dirigió el Ángelus desde la biblioteca del Palacio Apostólico.

A pesar de la aparición del papa en la misa dominical y de las versiones que ya desmentían los rumores de que algo oscuro pasaba en el Vaticano, Conservative beaver, insistió y actualizó la información señalando: "Parece que el papa Francisco tuiteó esta mañana, sin embargo, el Conservador beaver confirmó que el papa tiene un equipo de redes sociales que programa sus publicaciones, y esta fue planificada con anticipación. Si hace clic en el tweet, puede ver que se usó TweetDeck para programar la publicación".

Para tratar de reforzar la información, añadió: "El papa Francisco todavía se encuentra en custodia federal en Italia, por lo que no se lo ha visto en video".

Nada de lo descrito aquí ocurrió en el Vaticano. Lo único cierto en esos predios suscitado el fin de semana fue la muerte del médico personal de Francisco: Fabrizio Soccorsi, por complicaciones derivadas de la COVID-19. El galeno estaba hospitalizado desde el 26 de diciembre por cáncer.