Nicolás Maduro y Cilia Flores recibieron el sábado 6 de marzo la primera dosis de la Sputnik V. En declaraciones que refiere sin citarlo teleSUR, el mandatario venezolano dijo que esperó a que inmunizaran al personal médico para ser vacunado. También mencionó que ya el 60% de las vacunas rusas han sido aplicadas, mientras que este lunes 8 de marzo empezaría la jornada con la vacuna china SinoPharm, principalmente para docentes.
Alejandro Crespo Freytes, presidente de la Sociedad Venezolana de Pediatria, filial de Aragua, denunció en su cuenta de Twitter (@AleCrespoF) que las 100.000 dosis de Sputnik V que llegaron a Venezuela el 13 de febrero, no alcanzan para los 1,5 millones de trabajadores de la salud que hay en el país, especialmente si los políticos se vacunan primero.
En Argentina, Chile, Ecuador o Perú, la vacunación contra COVID-19 de funcionarios políticos y otros ciudadanos que no pertenecen a los sectores considerados prioritarios ha desembocado en escándalos e investigaciones. En Venezuela, para sorpresa de nadie, no fue el caso.
El mandatario anunció abiertamente en alocuciones televisivas transmitidas el 9 y el 17 de febrero de 2021 que los diputados de la Asamblea Nacional (AN) recibirían la vacuna en esta primera fase, al igual que el personal de salud, mientras que los maestros y personas de tercera edad fueron excluidas. A su juicio, los legisladores son prioridad, a pesar de las indicaciones de la Organización Panamericana de la Salud (OMS).
“Deben ser inmunizados quienes tienen más vulnerabilidad de morir por la COVID-19, adultos mayores y adultos con enfermedades crónicas. Los grupos prioritarios deben ser primero el personal de salud porque están más expuestos (...), incluidos profesionales que estén en contacto con adultos mayores, en áreas sociales claves y que no pueden dejar de trabajar”, declaró Jarbas Barbosa, subdirector de la OPS.
Aunque sean servidores públicos y conduzcan los destinos de un país, durante una pandemia pueden cumplir mucho de su trabajo a distancia, sin contacto con pacientes, a diferencia de un médico o enfermero en primera línea contra la pandemia. Eso no detuvo a Alfonso Campos, Anyelith Tamayo y Rubén Limas, tres diputados de la asamblea legislativa apoyada por Maduro, de anunciar en sus redes sociales que ya habían sido vacunados.
Para vacunar a 1,5 millones de trabajadores de la salud hacen falta tres millones de dosis. Si en tres semanas solo han puesto 60.000 vacunas, lo cual se traduce en un ritmo de 20.000 por semana, entonces inmunizarlos a todos tomaría aproximadamente tres años, tal como indicó el doctor Crespo en sus redes sociales. Incluso si se contara con la cantidad exacta para cubrir solo la primera dosis, al ritmo que llevan, se necesitarían 75 semanas para vacunar a todo el personal.
De acuerdo con Deutsche Welle, al menos 10% del personal médico venezolano ha sido inoculado para protegerse del coronavirus en esta primera fase. De las 100.000 vacunas del lote inicial, solo se distribuyeron a los hospitales 70.989 y el Gobierno no precisó a dónde fue destinado el resto, según el portal Crónica Uno.
